Lady Sunshine y Mister Moon – ¿Qué hay que tener en cuenta a la hora de tender la ropa en el exterior? El sol brilla, ¡viva, viva, voy a tender la ropa! Eso es lo que piensa mucha gente, quizá tú también, y estás deseando hacer la ropa hoy. El sol calienta y la ropa se seca más rápido. ¡Perfecto! Pero, ¿dónde ha quedado el color? Sí, es decepcionante. La ropa está seca, pero el color ha desaparecido.  

Un poco de viento 

Si el tiempo lo permite, lo mejor es colgar la ropa al aire libre para que se seque. Sin embargo, el lugar ideal para ello no es el famoso lugar al sol, sino un lugar a la sombra, idealmente con una ligera brisa. Esto se debe a que el viento seca la ropa más rápidamente y la alisa, por así decirlo, evitando las arrugas. Así, el planchado debería ser más rápido. 

Lugar sombreado, porque el sol directo decolora la ropa 

A la sombra, la temperatura es algo más baja que al sol, pero tus prendas -sobre todo las de color- te lo agradecerán. Los colores brillantes se mantienen frescos y vibrantes durante más tiempo a la sombra, porque la luz solar directa decolora la ropa. Por lo tanto, coloca la ropa (de color) del revés antes de colgarla. El sol también decolorará la parte interna de la ropa, pero esto no es tan malo en el interior de la ropa. Es más importante que los colores de la parte de la ropa que es visible cuando se usa se mantengan agradables y frescos. 

Mister Moon también puede hacerlo 

Lo que el sol puede hacer, en este caso, también lo puede hacer la luna. Tanto si se trata de una cálida tarde de verano como de un frío y estrellado cielo de invierno, por muy encantadora y hermosa que sea la luna que brilla en el cielo, no sirve para lavar la ropa. Eso es porque la luz de la luna decolora la ropa tanto como el sol. La luz de la luna llena tiene un efecto especialmente fuerte. 

Ropa blanca con un tinte amarillo 

El sol decolora de la ropa de color, pero también puede ocurrir lo contrario con la ropa blanca. No, tu ropa blanca no brillará con los colores más brillantes en el futuro, pero es posible que tu ropa blanca adquiera un tinte amarillo bajo el sol intenso. 

Cuelga la ropa al sol para eliminar las manchas 

También puedes aprovechar el efecto blanqueador de los rayos del sol. Las manchas persistentes que no quieren salir de la ropa se pueden blanquear con la ayuda del sol. Lava la ropa afectada como de costumbre y cuélgala con las manchas no deseadas en dirección al sol. La mejor manera de hacer esto -si hace falta- es usar un tendedero, ya que esto te permite rotar la ropa junto con el curso del sol, para que siempre tengas la cantidad perfecta de luz solar sobre la mancha no deseada. Se recomienda colgar las prendas correspondientes con pinzas para que la ropa se blanquee de la forma más uniforme posible. En lugar de un tendedero, también puedes colocar tus prendas en el exterior con las manchas hacia arriba y dejar que el sol haga el trabajo.